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Tómame o déjame

Me pregunto qué será de mis admirados, de mis seguidos, cuando se hagan viejitos, y si podré verlos, en persona, yendo a su casa, a verlos, cuando ya no estén en la cresta de la ola.

Por ejemplo, una tira de años he sido seguidor de Mariah Carey: desde su nombre hasta su voz, desde su cuerpo a su saber estar en el escenario, desde su mal gusto combinando ropa hasta la envidia que sentía por sus novios (Luis Miguel, Sean Puffy Combs, ...)... Todo me encantaba de ella. Estuve cerca de verla en vivo en la calle Rafael Gozález Abréu, 6, en Sevilla (los 40), hace años, que "pasó" por aquí, literalmente, como una estrella fugaz... No vi nada... Desde entonces entendí que la única forma de expresarle mi admiración y estar cerca de ella sería cuando fuese viejita, pues le seguiría admirando igual, pero sería más accesible y, hasta le resultaría gracioso que un sesentón se pasara por su mansión de Puerto Banús o donde quiera que la localizara, a presentarle mis respetos... jejejeje

Idem con la Diosa de Ébano... jejejeje también

Desde hace unos 10 años o así estoy pasando por una fase más accesible y terrenal: estoy PastoraSolerizado. La verdad es que, siendo de Coria del Río, igual me es más fácil conocerla en su apogeo máximo, que muchos creen que es ahora, aunque por mucha Eurovisión y por mucha "Mala costumbre", creo que está por llegar, porque no le veo el techo, la verdad... Esta mujer es increíble.

Me tiene loco, de verdad. Me toca la fibra y es capaz de hacerme sentir tantas emociones con sólo 12 ó 14 temas de un disco que no doy crédito.
La ví a 2 metros en Fnac presentando su último disco; esperé 3 horas ó 4, de pié, para verla ahí. De verdad, me impactó.

Aunque creo que el tema está en mí: me dejo sentir. Le oigo. Le escucho: dejo que su voz me toque, me acaricie la cara, me cante una nana...

Llegado a este punto lo que creo que quería decir en este post era que, quitando gustos artísticos en general y actividades de fan variadas (twitters, facebooks, followings, ...) soy una persona que es raro que me vean defendiendo a muerte nada: no soy fanático de ideas, no soy left/right, no soy alameda/remedios, no pongo pegatinas en mi coche... Yo soy yo, lo que está de mi cuerpo epidermis pa denrtro... y puedo estar cerca de algo/alguien, pero es muy, muy raro que gire en derredor de ello/él o ella incondicionalmente... ¿Pa qué? Para bailar el agua ya vendrán otros...

Que estén ahí no depende de que se rompan o no la casmisa por uno...

No aguanto eso de o conmigo o contra mí... ¡Anda y que te den!

El trabajo, lo necesitas. La familia, te toca.

Lo demás forma parte de tu reino, y el rey eres tú.

Paso de convencionalismos, peloteos y tragaderas lamentables de sistemas absurdos, relaciones absurdas...

No, no los quiero.

Como decía Mónica Naranjo, Tómame o déjame. Tú  mismo.

En fin, Las Cosas...

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